DECLINACIÓN DE LA FUNCIÓN PATERNA EN LA FAMILIA MODERNA

Resumen

En todos los tiempos la autoridad paterna ha tenido gran predominancia sobre la institución familiar, pero como plantea Philippe Julien, en su Ensayo sobre la paternidad " El Manto de Noé" concuerdan, tanto historiadores, ,juristas como sociólogos, que en los últimos siglos, el poder del padre sobre su familia, ha sufrido una declinación social, especialmente en el siglo XX. El presente trabajo es tanto de verificar si tal declinación del poder del padre aconteció en nuestro país, con similares, características. Recorriendo nuestra legislación acerca de los derechos y deberes del padre, encontramos que el derecho argentino tiene sus fuentes en el Derecho Romano. Desde la época Republicana fue cambiando la fisonomía de la familia romana y se fue restringiendo el absolutismo del pater al intervenir el Estado.

Este padre, el que desempeña la función, es el que cumple con la demanda de la cultura de educar y transmitir el saber en cuanto a normas y valores en el hijo, quien, biológico o no, es el reconocido como tal ante la ley social y en el afecto y pertenencia que le otorga. Esta función, no es la del padre real, que sería el espermatozoide. Ahora bien, así como el discurso jurídico pone en evidencia una declinación de la función paterna, como así también el de la sociología, desde el discurso del Psicoanálisis, el concepto alrededor de la pregunta «qué es un padre» también ha sufrido sus avatares.

Jacques Lacan, en los primeros años de su enseñanza, también resaltó la figura del padre como interdictor e instaurador de la ley simbólica, pero ya en 1957, señala que los mitos Freudianos deberían ser interpretados como un sueño de Freud, como su propio ideal de un padre sin fallas, y que lo que estos mitos ocultan, es que el padre está también marcado por una falta, cayendo así dicha figura del dictador omnipotente, como figura de la ley, ya que él también por su condición de hablante, no puede gozar del objeto que desea, ya que la sexualidad humana no es Instintiva ni natural, no es reductible a la genitalidad, ya que no está sometida a un objeto predeterminado y universal que le daría su unidad y finalidad.